Las superficies de Hormigón Pulido resultan ser la alternativa ideal para muchas personas que buscan que la apariencia de sus suelos luzca siempre impecables, pues debido a las propiedades que posee esta superficie, el hormigón pulido con su brillo definitivamente pueden llegar a proporcionar un excelente toque de elegancia y pulcritud.
Cuáles son las ventajas del uso de Hormigón Pulido
Debido a que como se mencionó anteriormente, esta alternativa suele ser elegida por muchas personas por las excelentes propiedades estéticas que estas superficies pueden llegar a brindar, el hormigón pulido cuenta con mayores ventajas que no sólo se quedan en el terreno de lo estético y superficial, ya que estas superficies presentan además una gran longevidad y excelente durabilidad.
Es por esto que las superficies de Hormigón pulido resultan ser la opción ideal para todas aquellas personas que se encuentran en la búsqueda de una superficie de calidad que además de ser duradera, les ofrezca un efecto visual que pueda resultar bastante agradable, siendo otra ventaja también de esta superficie el hecho de poder llegar a adaptarse muy bien a distintos entornos tanto interiores así como exteriores.
Otro punto a favor que posee el Hormigón Pulido, resulta ser el hecho de que éste puede llegar a contribuir con el ahorro de energía, esto se debe a que a diferencia de otros tipos de suelo que existen, el hormigón pulido por las propiedades de sus materiales puede llegar a absorber tanto calor como frío y posteriormente liberarlo de manera paulatina, lo cual hace que sea una opción bastante ideal para espacios interiores como pueden distintos establecimientos e incluso el hogar.
Cabe mencionarse que estas superficies de hormigón pulido suelen ser construidas con superficies de hormigón fraguadas en la obra, o también conocidas como superficies de hormigón armado, siendo ésta una ventaja debido a que puede llegar a adaptarse no sólo a distintos tamaños y formas, sino también a otro tipo de exigencias propias de la construcción.
Cómo aplicar
Para su correcta aplicación se recomienda colocar primeramente una capa no mayor a 5 cm de material compuesto por agregados gruesos (piedras partidas) y finos (arena), así como también por material ligante (cemento).
Cabe destacar que éste material debe ser vertido en placas que no superen los 4 metros, esto con la finalidad de evitar cualquier tipo de agrietamiento, hay quienes aplican mallas de material metálico antes de verter el hormigón con la finalidad de asegurar una mayor resistencia a los distintos fenómenos que puedan presentarse, como a los cambios climáticos, aunque esto suele realizarse por lo general en los ambientes exteriores, debido a la exposición que estos tendrán.